El día de ayer pasará a los anales de la historia en las bolsas. El anuncio de la proximidad de una vacuna fiable, de la mano de Pfiser, revolucionó a los mercados.
Lo que ocurrió es que los inversores se lanzaron a comprar todo lo que más había bajado y a vender lo que más había subido, en algunos casos de modo irracional, como suele ocurrir en los mercados.
El Ibex fue el índice que más subió, porque era el que había sido más castigado, los sectores turísticos y bancarios volaron literalmente, al igual que las muy penalizadas Telefónica, Repsol, Merlin, Colonial, por ejemplo.
Sin embargo los valores fuertes y alcistas sufrieron recortes importantes, como Pharmamar, Solaria, Viscofán o Cellnex.
Incluso el todo poderoso Nasdaq acabó el día con recortes, mientras subían también, en aquellas latitudes, los valores más penalizados.
Y la pregunta es ¿ahora qué?, ¿va a seguir subiendo lo débil y bajista y bajando lo fuerte y alcista?.
Pues lo normal es que poco apoco vuelva la racionalidad a los mercados, y que el mismo mercado ponga las cosas en su sitio.
De los valores bajistas, que han tenido fuertes subidas, habrá alguno que consolidará bien y seguirá ganando altura, incluso pasará a ser alcista, (ACS, Inditex, Grifols y CIE son claros candidatos), pero otros van a perder todo lo ganado y seguirán con su tendencia bajista, así que hay que ir con cuidado y esperar a que el mercado digiera este movimiento, para ver por donde van los tiros, antes de lanzarse a comprar cualquier valor.
Y los valores alcistas, que ayer no participaron de la orgía alcista, y en muchos casos, bajaron, seguramente nos están ofreciendo una buena posibilidad de compra. Va a seguir habiendo volatilidad, pero cuando las aguas se calmen, deberían seguir siendo las claras beneficiadas.
Hoy puede ser otro día apasionante, y seguramente, tras la sobrerreacción inicial, vuelva un poco la cordura.