Día sin mucha historia, en el que podríamos haber bajado bastante y no lo hemos hecho.
Lo de bajar fuerte es porque nos han rebajado la calificación, y eso siempre es malo. Lo que pasa es que como hoy es festivo en Nueva York, da la impresión de que nadie se atreve a mover ficha, por lo que mañana será otro día.
Las pautas siguen siendo las mismas, por arriba el 9.550 marcaría un cambio al alza y la pérdida de los 9.000 al cierre podría abrir las puertas a un nuevo tramo bajista fuerte.