De nuevo una mala semana, y de nuevo con mucho trabajo que no me han permitido escribir todos los días. Mil disculpas.
En cuanto al Ibex, pues por el momento el 7.500 no ha sido perforado y el viernes hemos visto un intento de dar la vuelta.
Aún así, la cosa no está nada clara. Lo más preocupante es que el resto de índices mundiales se han decantado a la baja y su aspecto es malo.
Con todo esto volvemos a precios claramente atractivos en valores solventes y con gran dividendo, como Santander, Telefónica o BME.
Todas las noticias apuntan a que la bolsa no va a subir nunca, pero eso no es así, más bien al contrario. Cuando los particulares huyen de la bolsa, los Tiburones les compran las acciones a precio de saldo, al cabo de unos años, unos se lamentan y los otros ganan barbaridades de dinero. Seguramente estamos en este caso.
No vamos a saber cuando llegaremos a los mínimos, pero a estos precios la compra es segura con visión al medio, largo plazo. Si me preguntáis si vamos a bajar más, la respuesta es que lo más probable es que sí. Lo que yo creo que va a pasar es que veremos precios por debajo de los 7.500 del Ibex, y cuando los recuperemos será momento de comprar. Si antes de recuperarlo hacemos alguna barbaridad y bajamos a 6.500 o más, habría que tener claro que tendremos una de las mejores oportunidades de nuestra vida de invertir.
En cuanto a valores concretos, pues los pobres son cada vez más pobres, es decir que los que bajaban mucho son los que siguen bajando más, y los valores pequeños y medianos están viendo niveles de precios absolutamente impensables. Como ejemplo, Fersa, SPS, Natra o Natraceutical siguen marcando nuevos mínimos históricos, otros medianos como Amper o Vueling y muchos más, siguen mostrando unas cotizaciones que no habíamos visto en muchos años y ya por último, valores que lo estaban haciendo bien han acabado por contagiarse y caer con fuerza, como es el caso de Grifols.
Hoy por hoy, los únicos valores que parece que pueden aguantar son BME, Inditex y Maphre, pero sinceramente tengo muchas dudas sobre los dos últimos.
En la situación en la que estamos solo me fío de Santander, BME y Telefónica, y teniendo claro que lo más probable es que aún no hayamos visto los mínimos.
Por el momento, la semana puede empezar tranquila, pero cuidado porque las ordas bajistas siguen atacando.