Parece que las noticias del fin de semana no han sentado demasiado bien a los mercados.
El Ibex muestra una vela negra envolvente que bien podría tener continuidad bajista. Lo que ocurre es que cuando empiezan a alternarse velas negras y blancas, como estos días, se antoja complicado adivinar el tono de la siguiente vela, por lo que lo más cauto es mantener la calma y esperar precios más bajos para comprar o bien no hacerlo hasta la superación, si se produce, de los 9.350 puntos.