Pueden llamarnos agoreros, pero esta situacióin es exactamente lo que nos temíamos este fin de semana. Esrtamos en un rebote de la tendencia básica bajista, y lo normal es combinar épocas de recuperación con grandes caídas.
De momento la zona de los 8.500 ha puesto freno a la caída, pero la vela negra de hoy, tras el hueco de apertura, no augura nada bueno.