Cuando parecía que la vela de ayer podía ser otra falsa alarma, resulta que nos encontramos con otra vela negra con más volumen que ayer. Preocupante.
Lo cierto es que mientras no perdamos los mínimos anteriores de 10694, tenemos esperanzas de que sea otro susto sin importancia, pero también es cierto que en gráfico de cierres, siembre había respetado los 10.865 y hoy hemos cerrado en los 10.821.
Normalmente tras dos velas negras, el tercer día bajamos más, pero al final del día recuperamos y marcamos una vela de vuelta. Siendo mañana viernes, el cierre de mañana es muy importante. Si recuperamos y cerramos por encima de los 10.865 bien, pero si no pasa esto, hay que andarse con muchísimo cuidado.
En nuestro sistema de especulación vamos a seguir fuera a la espera de acontecimientos. Por suerte nos salimos ayer con mínimas pérdidas.
En acciones, hay muchas que tienen un aspecto peligrosísimo. Y lo cierto es que estamos en un punto desde el que, técnicamente, puede venir una bajada muy contundente, pero también pueden ser los últimos coletazos para acabar con una gran subida.
Y como no tenemos una idea clara de que es lo que va a pasar, lo más inteligente sigue siendo estar con mucha liquidez y esperar acontecimientos. Y si vuelve a haber una señal que nos parezca clara, hacerle caso. Porque nos equivocaremos una, dos o tres veces, pero cuando acertemos nos compensará con creces.