Parece que al fin se ha impuesto la lógica y el Ibex tras una apertura fuerte ha ido perdiendo posiciones para formar una vela negra que tiene la característica de envolver a la vela blanca de ayer, en lo que es una de las señales de vuelta más claras de la teoría de velas japonesas.
El resto de los índices que la semana pasada ya daban vuelta bajista han continuado con sus caídas en lo que parece una vuelta a la tendencia principal, que como sabemos sigue siendo bajista.
La señal definitiva vendrá dada cuando el Ibex pierda los 9.200 puntos, si esto ocurre el primer objetivo bajista es el soporte de los 8.830 puntos que funcionó bien a mediados de mayo, aunque el primer nivel claro de soporte que coincide con el primer retroceso de Fibbonacci corresponde a la zona de 8575 puntos. Si el movimiento fuera violento a la baja, este nivel es muy probable que detenga los descensos en un primer momento.
Los objetivos de caída puros de Fibbonacci son el 8220 y el 7865. según esto vamos a estudiar el posible movimiento bajista.
Imaginando que estamos en lo cierto y que este movimiento es el bueno a la baja, esta misma semana debería de romper los 9.200 puntos e ir directamente hasta los 8830. Lo normal es que desde ahí subiera hasta los 9.200 para volver a bajar a buscar alguno de los dos niveles de retroceso, el 8.220 o el 7865.
Este movimiento, tiene muchísimas probabilidades de producirse, lo realmente interesante será que pasará una vez se produzca esta onda bajista.
Si no pierde los 7.865, seguramente vuelva al alza intentando superar los 9.800 y cambiando la tendencia básica de mercado, pero si baja de los 7.865 se complica todo, porque significaría que este rally que hemos vivido no ha sido más que un gran «rebote» y podemos perfectamente perder los mínimos de 6.700.
Con el gráfico se ve un poco más claro.
Así pues, parece que lo que va a venir ahora es un movimiento fácil de caída, al menos hasta los 8.220.